El aumento del estrés térmico provocado por el calentamiento global se prevé que traiga consigo en 2030 pérdidas de productividad en todo el mundo equivalentes a 80 millones de puestos de trabajo a tiempo completo, según un informe de la OIT publicado a primeros de julio de 2019.
El nuevo informe de la OIT, Working on a warmer planet: The impact of heat stress on labour productivity and decent work (Trabajar en un planeta más caliente: El impacto del estrés térmico en la productividad laboral y el trabajo decente) se basa en datos climáticos, fisiológicos y de empleo, y proporciona estimaciones, tanto actuales como previstas, sobre pérdidas de productividad a escalas nacional, regional y mundial.